¿Cómo garantizar la bioseguridad en mi fábrica?

 

El conjunto de normas y prácticas de protección cuyo fin es prevenir la entrada y propagación de agentes infecciosos a la planta productiva conforman su bioseguridad. Invertir en cumplirlas es una de las mejores apuestas que todo industrial puede realizar, ya que sirve para preservar la salud y el bienestar de su capital humano, y con ello, otorgar garantías a sus operaciones. 

Esta inversión dependerá del grado de riesgo presente y del rendimiento esperado en las condiciones del entorno donde se ubica la fábrica. En general, es recomendable no escatimar en conformar un programa sólido y eficaz de bioseguridad, pues contar con el otorga importantes beneficios, principalmente 

• Garantiza la productividad y el cumplimiento de proyecciones de venta y distribución de productos, evitando fallas en el suministro de productos y pérdida de mercados
• Respalda el cumplimiento de los estándares de calidad y control, así como de los requisitos de clientes nacionales y/o de exportación
• Evita pérdidas por enfermedad y cuarentenas
• Reduce costos evitando o reduciendo el uso de tratamientos y gastos médicos del personal 

En un contexto industrial que evoluciona e incorpora tecnología cada vez más avanzada en prácticamente todas sus áreas, proteger la salud de las personas, la calidad de la producción y prevenir enfermedades es una prioridad para lograr los beneficios esperados. Es así como la bioseguridad no es un área solamente técnica, sino que constituye un pilar dentro del sistema productivo para lograr el máximo retorno de las inversiones realizadas en otras áreas.

Aunque existen decenas de medidas a emprender para mejorar la bioseguridad en la fábrica, repasaremos aquéllas que permiten evitar que las enfermedades ingresen a la empresa, así como las que evitan el contagio de las mismas. 

• Ajustes de infraestructura: aunque el objetivo es asegurar la bioseguridad de todo lo que entra a la empresa desde afuera, el primer paso es iniciar por la propia infraestructura. Considerar la construcción de cercos, la entrega de suministros con camiones desde afuera de ese cerco y limitar el acceso de unidades al terreno de la planta podría limitar considerablemente el contacto con fuentes de contaminación. 

• Protocolo para visitantes: en años recientes, a raíz de los brotes de influenza y por supuesto, del nuevo coronavirus, los protocolos sanitarios de acceso a prácticamente cualquier lugar no sólo se volvieron indispensables, también se intensificaron. La planta industrial no es la excepción, por lo que todos los visitantes también deben adherirse a un protocolo previamente acordado, que responda tanto a los estándares delineados por las autoridades de salud, como a las necesidades especiales de cada tipo de industria. Asegúrate de contar con una zona de aislamiento, bien acondicionada, a la cual canalizar a colaboradores y visitantes sospechosos de portar patologías contagiosas, donde puedan ser atendidos por personal calificado sin tener contacto con el resto del personal y del equipo.

Una empresa sana y con futuro. Implementar una combinación de medidas externas e internas es el camino para convertirse en una organización enfocada en prevenir, detectar a tiempo y solucionar problemas de bioseguridad, para evitar que estos obstaculicen su crecimiento. Si bien, esto requiere inversiones de tiempo, recursos económicos y de planificación, estas son medidas que brindan el incosteable beneficio de mantenerse saludable, tanto ahora como en el futuro. 

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