Conoce qué son los lubricantes biodegradables

Como su nombre lo indica, los lubricantes biodegradables se denominan así porque tienen la capacidad de degradarse naturalmente por la acción de organismos biológicos. A diferencia del petróleo, que se produce naturalmente y por lo tanto se considera inherentemente biodegradable pero sus derivados no pueden comercializarse, venderse y tratarse como biodegradables, los lubricantes que entran en esta categoría se distinguen precisamente por eso, porque son fácilmente biodegradables.

Los lubricantes biodegradables deben cumplir con los estándares ISO 9439 o OECD 301B, los cuales establecen que un lubricante que se ha degradado en más del 60% en 28 días es fácilmente biodegradable. 

Para determinarlo se debe tratar una muestra de lubricante con microorganismos en presencia de oxígeno y medir el CO2 producido por los microorganismos. Como se mencionó anteriormente, los lubricantes a base de petróleo son inherentemente biodegradables, pero no fácilmente biodegradables porque no cumplen con estos estándares. Los lubricantes a base de petróleo se degradan naturalmente a una tasa de 15 a 35 % en 28 días, por debajo del 60% requerido.

Además, el lubricante debe ser de baja toxicidad. Hay una variedad de pruebas que se utilizan para determinar la toxicidad. En su forma pura, el aceite mineral y el aceite vegetal se muestran poco tóxicos, pero los lubricantes no son sólo aceite puro. A medida que se incorporan aditivos a las formulaciones para compensar las deficiencias de rendimiento de los aceites, aumenta la toxicidad. 

La mayoría de los lubricantes biodegradables utilizan aceite vegetal, ésteres sintéticos, polialquilenglicoles o una combinación de estos como aceites base. Algunos aceites vegetales comunes que se utilizan son el aceite de soya, el aceite de semilla de algodón, el aceite de oliva, el aceite de girasol y el aceite de canola. Para mejorar el rendimiento, los agricultores están comenzando a generar cultivos genéticamente modificados diseñados y creados para su uso en lubricantes.

Actualmente, muchas aplicaciones y máquinas pueden emplear lubricantes biodegradables y cumplir con todos los requisitos de rendimiento. Los productos que pueden estar compuestos de aceites de soya incluyen:

• Grasas y fluidos hidráulicos de calidad alimentaria
• Grasas para automóviles, ferrocarriles y máquinas
• Transmisión de tractores y fluidos hidráulicos industriales
• Aceites para barra de motosierra
• lubricantes para engranajes
• Aceites para compresores
• Líquidos refrigerantes para líneas de transmisión y transformadores

Muchos más productos están en desarrollo y pronto podrían volverse viables en los mercados de lubricantes, por lo que a mediano plazo podríamos encontrar aceites de motor de dos tiempos, fluidos metalúrgicos y lubricantes especiales.  

A medida que incrementan la disponibilidad de recursos y la demanda de lubricantes biodegradables, los ingenieros y fabricantes pueden investigar y desarrollar más productos que realicen más aplicaciones, que funcionen mejor que los aceites minerales y por supuesto, que sigan siendo competitivos en precio, particularmente para emplearse en aplicaciones e industrias donde las preocupaciones ambientales y de seguridad son altas, como la marina y la agrícola, donde la contaminación podría tener efectos devastadores. 

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