5 Señales de que tus Máquinas Necesitan un Cambio de Aceite Inmediato

El aceite es protagonista cuando del correcto funcionamiento de la maquinaria industrial se trata. Este líquido lubrica las piezas móviles, mientras ayuda a disipar el calor y a reducir el desgaste. Sin embargo, con el tiempo, el aceite pierde sus propiedades, volviéndose menos eficaz y poniendo en riesgo la eficiencia y durabilidad de tus equipos. Para evitar averías costosas, es fundamental saber cuándo es necesario realizar un cambio de aceite. A continuación, te compartimos cinco señales claras de que tus máquinas necesitan atención urgente. 

1. Ruido inusual y vibraciones excesivas: Uno de los primeros indicios de que el aceite ha perdido su capacidad de lubricación es un aumento en el nivel de ruido y vibraciones. Si notas que la máquina emite sonidos más fuertes o inusuales, como rechinidos o golpes, es posible que las partes metálicas se estén rozando entre sí. Esto puede ocurrir porque el aceite se ha degradado y ya no forma una película protectora entre los componentes. Ignorar estos sonidos podría provocar un desgaste prematuro de piezas críticas y resultar en costosas reparaciones. 

2. Color oscuro y textura espesa: El aceite nuevo tiene un color claro, generalmente ámbar, y una consistencia fluida. Con el tiempo y el uso, se contamina con partículas de metal, polvo y otros residuos, volviéndose oscuro y más espeso. Una inspección visual puede ser suficiente para detectar este cambio: si al revisar el nivel de aceite notas que su color es casi negro y su textura es más densa de lo habitual, es momento de cambiarlo. El aceite viejo y contaminado pierde su capacidad lubricante y puede obstruir los filtros y provocar un sobrecalentamiento. 

3. Aumento de la temperatura operativa: Si tus máquinas comienzan a sobrecalentarse con frecuencia, esto podría deberse a un aceite degradado. El aceite lubrica y ayuda a regular la temperatura del motor y otros componentes. Cuando está sucio o deteriorado, no puede cumplir esta función de manera efectiva, lo que hace que la temperatura interna de la maquinaria suba. Monitorear la temperatura operativa de tus equipos es clave para detectar a tiempo un posible problema de lubricación. Si notas un aumento constante en las lecturas, no esperes para cambiar el aceite. 

4. Presencia de residuos y sedimentos en el aceite: El análisis del aceite puede revelar mucho sobre el estado de tu maquinaria. Si al revisar el aceite observas partículas metálicas o residuos visibles, esto indica que el aceite está contaminado y que podría estar circulando impurezas por todo el sistema. Esto es particularmente peligroso, ya que estos sedimentos pueden causar daños significativos en los rodamientos, engranajes y otras partes móviles. Un cambio de aceite inmediato es esencial en estos casos para evitar fallos mayores. 

5. Fugas de aceite y bajo nivel en el tanque: Las fugas de aceite son una señal evidente de que algo anda mal. Un nivel bajo de aceite puede indicar que hay una fuga en alguna parte del sistema o que el aceite se está quemando debido a un sobrecalentamiento. Además, si el nivel de aceite disminuye demasiado, las piezas internas pueden funcionar en seco, lo que genera un desgaste acelerado y puede llevar a una avería catastrófica. Realizar inspecciones regulares y mantener un control sobre el nivel de aceite te ayudará a prevenir problemas mayores.